Importancia de la lectura

Leer es una actividad enriquecedora, pues a través de ella adquirimos nociones del mundo que nos circunda. Interpretamos correctamente lo que leemos, a través de un proceso de significación y comprensión, mediante el uso del lenguaje, y si hacemos uso de ciertas técnicas, dicho proceso se hace más efectivo.  

Cabe destacar además, que este  proceso permite a los estudiosos adquirir conocimientos en diversos temas. La lectura a su vez genera una alternativa para insertarse en la educación, pues ésta se realiza de diversas formas y con varios objetivos.

En este orden de ideas, resulta imprescindible hablar sobre las diversas técnicas de lectura, entre ellas encontramos una de las más conocidas y utilizadas: La llamada  lectura rápida. Se dice que en promedio una persona lee 200 palabras por minuto, utilizando está técnica es posible aprender a leer 1.000 palabras por minuto. Un lector rápido es capaz de leer cinco veces más rápido y además aumentar su comprensión. Además de ser más adecuada para el cerebro, hace que omitamos la vocalización de las palabras con la voz interna, permitiéndonos crear imágenes rápidamente.

El dominio de la lectura rápida es fundamental para cualquier persona, desde un niño que está iniciando su proceso de aprendizaje hasta un profesional que ha empezado a ejercer su profesión, además, también puede convertirse en un hábito importante para incluir durante el tiempo libre.

Entendiendo la preponderancia que cobra la lectura en el desarrollo de las personas, no está de más mencionar algunos consejos que son muy eficaces a la hora de ejercitarse para una buena lectura rápida: Primero, es importante, dejar de imaginar la palabra hablada, captar grupos de palabras y  entrenarse para no leer el mismo pasaje dos veces. Ello no se logra de la noche a la mañana, no obstante, si se hace de la lectura un hábito, pronto se obtendrá la experiencia necesaria para conquistar un ejercicio profundo y comprensivo. También necesitarás buscar un ambiente tranquilo y bien iluminado. Recuerda,  es favorable leer cuando estés alerta y comprometido, de modo que ajustes tu velocidad de lectura de acuerdo con el material. Todas estas recomendaciones son fundamentales para el inicio de una buena lectura, acompañada por dos elementos cruciales: la rapidez y la comprensión.